Hay anuncios en todas partes
La otra vez estaba en clase, y nos mencionaron que la publicidad siempre está presente, pero no nos percatamos de la cantidad de publicidad que hay a nuestro alrededor ya que nuestro cerebro percibe solo lo que quiere y le interesa. Para empezar, la publicidad que vemos no es mala, solamente nos da información sobre algo que puede ser que queramos comprar.
El punto es que, apenas acabó la clase, salí y vi que, sin exagerar, hay publicidad en todo lado.
Por ejemplo, al salir de tu casa, lo primero que vez en la calle son los postes de luz. Eso es lo normal, ver postes de alumbrado público. Pero si te fijas bien, en ese poste han colgado muchas personas un papel con un número de teléfono para que les compres su producto.
Y solamente en esta categoría de anuncios, hay mucha variedad. Hay unos que son muy comunes.
- Se dictan clases de matemática.
- Se alquila cuarto.
- Se pasean perros.
Otros no tan comunes.
- ¿Quieres conocer la verdad sobre la existencia? Únete a mi grupo.
- Se hacen amarres de por vida.
- Se lee el futuro.
Luego están los que probablemente te quieren estafar
- ¡¡¡Accede a préstamos rápido y sencillo, solo danos tu tarjeta de crédito!!!
- ¿Buscas trabajo? 10 000 soles de sueldo inicial, sin experiencia.
- ¡¡¡Se tu propio jefe con una inversión muy pequeña!!!
Y cuando hay elecciones, también están los políticos:
- Vota por mí.
- El mejor partido del mundo, no somos corruptos.
- Seguridad para todos, vota por mi partido.
El punto es que, hay demasiados de estos anuncios en los postes. Y siempre van cambiando, ya que la gente que pone su poste, los quita.
Bueno, ya vimos los postes. De seguro quieres revisar que tus pasadores estén bien amarrados.
¡Ah mira!, hay publicidad en el suelo.
Luego, miras a las casas a tu alrededor y lo más seguro es que al menos una tenga colgado o pintado en su fachada alguna marca o anuncio publicitario.
Vas a la estación de bus y ahí también hay anuncios. En general, en todos los medios de transporte hay. Trenes, carros, metros, aviones... En todo lado.
También hay al buscar en internet, en la radio, en la tele, en los videojuegos, en las películas, en las series...
Todo tiene publicidad.
Lo más interesante es como el cerebro puede procesar toda esta información y quedarse con solo los anuncios que generaron algún impacto. Y la verdad es muy bueno esto porque al recordar un lugar, no sueles recordar toda la info, solo lo relevante, y los detalles cruciales para lograr explicar y recordar mejor las cosas.
Que la publicidad esté en todas partes no es malo, pero tampoco es bueno. Es algo que está ahí, y siento que, al ser algo tan común, ni le prestamos atención a las finales, solamente cuando queremos.